Esta semana pasada 64 organizaciones no gubernamentales del Perú fueron expulsadas del Consejo Nacional de Derechos Humanos. A algunos de ellos, el Gobierno de Alan García los acusa de "traidores a la patria". Por su parte, los defensores de derechos humanos denuncian el recrudecimiento de la persecución y la criminalización de la protesta ciudadana.En el centro del huracán se encuentra la Asociación pro Derechos Humanos del Perú APRODEH, calificada por el Gobierno del presidente, Alan García, como "traidores a la patria". La acusación surgió después de que esta organización, atendiendo una solicitud de apreciación de la Unión Europea, enviará una carta a la Eurocámara en la que se señalaba que el Movimiento Revolucionario Tupac Amaru, no había realizado ninguna acción terroristas en los últimos 8 años. Unos días después, las autoridades europeas tomaron la decisión de no incluir a esta agrupación guerrillera, en su lista de grupos terroristas, algo que había sido solicitado por el Gobierno peruano.
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