Los pueblos indígenas de México tradicionalmente han desarrollado un modelo de vida basado en el respeto a la madre naturaleza, así como en su capacidad como grupo social para impulsar un modelo comunitario respetuoso con la dinámica de libertad y autogestión. La represión actual en Chiapas, Estado del sureste mexicano, no se observaba desde 1994, año de la insurgencia del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Se ha producido un aumento significativo en cuanto a la militarización de la zona, se han reactivado grupos paramilitares, se ha incrementado el número de agresiones y hostigamientos a las comunidades indígenas así como el número de expulsiones y extorsiones sobre sus tierras. Los poderes públicos obstaculizan el acceso a los recursos básicos y el libre desarrollo personal y colectivo. Estas dificultades afectan especialmente a la posesión de la tierra, el acceso al agua, a la energía, la biodiversidad, la educación y la salud.Para tratar el tema en cuestión el programa La Luna Sale a Tiempo, de Radio Luz, de Valencia, entrevista a Óscar Llago, miembro de la Comisión Chiapas de la Confederación General del Trabajo (CGT).
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